Como vimos en la Unidad 2 de la carpeta, podemos identificar los siguientes
tipos de crítica:
La crítica descriptiva o reseña: describe la obra. Brinda información.
La crítica morfológica: observa los recursos técnicos y expresivos de cada
obra.
La crítica valorativa: propone un juicio de valor del cual parte para el
desarrollo.
La crítica propositiva: utiliza a la obra como objeto para la proposición.
La crítica erudita: se posiciona desde el lugar del saber y lo culto.
La crítica interpretativa: propone en la escritura una nueva obra, que ubica
el desarrollo de la cultura y de la historia, transformando el texto en fuente
de conocimiento.
Los tres primeros tipos (la crítica descriptiva o reseña, la crítica morfológica y
la crítica valorativa) desarrollan un periodismo de información, que da cuenta
de datos objetivos de la obra, y pone en circulación aquello que la obra misma
propone en su estructura.
Esta forma de escritura, la podemos ubicar en el periodismo cultural como
aquella que ubica su accionar en la sección específica de arte y cultura, y cuyo
principal objetivo es la difusión de la obra en cuestión y el comentario sobre
la misma.
El segundo grupo (la crítica propositiva y erudita) invita a pensar al periodismo
como una actividad legitimada como actor social que plantea transformaciones
y reflexiones a partir de lo abordado, y a postular la verdad de la obra como única. Esta forma narrativa implica un mayor compromiso del escribiente, ya que alude a un contenido “extra” de la obra en sí misma, que le permite jugar con ciertas articulaciones en el campo cultural en su conjunto, emitiendo opinión.
La tercera variable la compone la crítica interpretativa, a la que podemos
describir como la verdadera crítica periodística que propone al periodista
como intelectual del campo de la cultura, que observa, analiza, problematiza
y expone a la obra en toda la complejidad de su relación con el mundo en la
que surge.
Un comentario puede adquirir la forma de una reseña, una crítica morfológica
o valorativa siempre centrando el eje de la escritura en la obra misma.
La opinión implica un compromiso mayor del escribiente que se posiciona
frente a la obra desde una visión ideológica y subjetiva.
La escritura crítica convierte al periodista en un intelectual.
El principal objetivo de la escritura periodística en el campo crítico es la
comunicación del sentido global de la obra en toda su potencialidad y utiliza
para ello la herramienta de las grafías en su mayor concepción posible, como
sostiene Roland Barthes:
(es) […] una escritura cuya función no es solo comunicar o expresar, sino imponer
un más allá del lenguaje que es a la vez, la Historia y la posición que se
toma frente a ella.
(Barthes, 2003: 11)
Con variadas expresiones, manifestaciones diversas, y soportes, se hace
necesario comprender que la función crítica es un hecho social.
De tal modo que la intervención de novedosas formas de producción textual
e intercambios inéditos en el marco de la web –blogs, redes sociales, páginas
especializadas– posibilitan pensar la función crítica como una renovación aún
en proceso de ponderación sobre la significación final de las mismas.
La multiplicación de formas narrativas, y la proliferación de sitios online,
produce un escenario móvil, con relaciones influyentes en los imaginarios
socioculturales.
Tales materiales se ubican frente a un cambio de los públicos, insinuando
a su vez una alteración de las tradiciones propias del campo crítico.
La escritura problematiza el sentido del periodismo como actividad informativa
y descriptiva, para convertir a la profesión en una acción intelectual crítica
que devela el universo del arte y la cultura como campos de conocimiento
del mundo.
La tecnología planteada como problema de la creación humana, deriva
en operaciones que superan ampliamente las determinaciones
fundadas en dispositivos, para ceder a las denominadas tecnicidades
desde el espacio de la configuración de los lenguajes. Pero, ¿constituye
el avance de la tecnología un universo de desarrollo de formación
crítica, activa y lúdica?
La evolución de los soportes de registro, reproducción y circulación
de los productos generados propicia una realización social colectiva y
a la par personal que define cambios permanentes en los debates sobre
la escritura crítica desde el periodismo cultural. ¿Es posible reconocer
los condicionamientos y límites de la intervención profesional ante el
ejercicio crítico en los medios masivos en relación con los sitios más
personales de desarrollo escritural? Sin dudas, a largo de la historia
de la humanidad, la sociedad ha generado múltiples formas de actividad
crítica, pero no siempre todo aquello que se nombra como tal
se constituye como analítico.
A partir de la visualización del siguiente unitario desarrollar la actividad
sugerida.
“Teatro en la dictadura” de Cristian Gabriel Cabruja
Durante los oscuros años de la última dictadura militar en Argentina,
caracterizados tanto por un fuerte accionar represivo de las fuerzas armadas
y policiales, como por un fortalecimiento de los mecanismos de control
sobre la sociedad, el teatro rosarino se constituyó como un imponente
espacio de resistencia, permitiendo sortear la censura y establecer
alternativas a la impuesta cultura oficial. A través de testimonios de actores,
directores, dramaturgos, críticos, vestuaristas, músicos, docentes y
estudiantes, El Teatro en la Dictadura. Rosario 1976-1983 se propone
construir y recuperar la memoria sobre el movimiento teatral rosarino
durante el sombrío periodo de facto. (Fuente. <www.cda.gob.ar>)
Guía de trabajo:
Elaborar un comentario que contenga:
Título
Nombre del unitario
Director
Modo de producción
Actores/sujetos involucrados
Descripción
Elaborar una opinión que contenga:
Título
Nombre del unitario
Director
Modo de producción
Temática abordada
Elaborar una crítica que contenga:
Hipótesis de desarrollo (¿desde donde partir para observar la obra?)
Datos del unitario
Descripciones
Interpretaciones socioculturales de trabajo
Definiciones
Ejes conceptuales de desarrollo y lenguaje utilizado
Cada uno de los géneros diferenciados entre sí, puede ser abordado
desde sus diversas posibilidades (crítica descriptiva o reseña, crítica morfológica,
crítica propositiva y erudita, crítica valorativa, crítica interpretativa),
e indicando el espacio de publicación pensado para la propuesta,
justificando extensión y estilo de escritura (revista especializada, suplemento
cultural, sección de un diario, blog, web, red social).