Unidad 3 > 3.3. Convergencias y multiplicidades del arte digital

3. El arte y la tecnología como objeto crítico

3.3. Convergencias y multiplicidades del arte digital

Con la evolución tecnológica los modos de habitar y percibir el mundo se transforman, y por ende, el campo artístico vive en un permanente desajuste entre la historia del arte y las innovaciones artísticas. Un desajuste que no es lineal sino convergente, y que propone, desde las primeras vanguardias hasta la actualidad, reflexionar sobre las multiplicidades en el arte digital.


Podemos decir que el encuentro entre el arte y la tecnología viene desde los inicios marcando una evolución de doble sentido: técnico-administrativo, ligado a las herramientas de uso; y cultural-simbólico, vinculado a las formas de expresión que permiten el desarrollo tecnológico.


Así pasamos de la pintura a la fotografía, de la fotografía al cinematógrafo y de la animación tradicional a los hologramas. En todo este proceso ha habido no solo una evolución de la técnica, sino del lenguaje.


La pintura de caballete expone la idea de representación mimética. Ya la pintura expresionista propone captar sentimientos y emociones; la fotografía, un instante en el tiempo; y el cine, un tiempo en el espacio. La animación tradicional, el trazo del artista; y el holograma, la utilización de software y dispositivos electrónicos para la creación de mímesis de los objetos.


Si bien cada expresión artística tiene su propio lenguaje, el problema siempre radica en cómo captar las formas de mundo. De tal modo que, además de analizar las representaciones posibles que el campo tecnológico le permite a la creación artística, la crítica debe observar las trasformaciones en los modos de comunicar, y en el universo comunicante.


El arte y la tecnología como objeto crítico La crítica problematiza las prácticas y usos de las tecnologías en el campo artístico.


Estimula la comprensión de las relaciones entre la tradición histórica de los lenguajes del arte, la cultura y los medios de comunicación digitales. El crítico respeta las formas propias de cada lenguaje específico y observa las trasformaciones en los modos de comunicar, y en el universo comunicante.


La crítica elabora un modo de pensar la técnica, la tecnología y sus usos en el campo artístico-comunicativo, a partir de la dimensión histórica, la productiva, la comunicativa, y la económica- política. La crítica acompaña la obra, no la cierra, sino que por el contrario la amplía.


La función de la crítica ofrece marcos de lectura intertextuales de las obras, que permitan al lector contemporáneo, realizar su propia bús queda de sentido representativo y estético.

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